VIDAL DEJÓ ATRÁS EL DUELO ELECTORAL Y RETOMÓ LA CAMPAÑA EN UN BASTIÓN PERDIDO

A 19 días de sufrir una amplia derrota ante el candidato a gobernador de Todos, Axel Kicillof, la mandataria provincial volvió a las recorridas. De esta manera, busca generar mayor cercanía con los ciudadanos. El puntapié fue el interior bonaerense que le dio la espalda en las PASO.
Después de un largo duelo electoral, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires dejó de lado las reuniones con su séquito de funcionarios, intendentes y legisladores, para retomar la campaña. Es que, el golpe asestado por las PASO dejó grogui a la Provincia. Por caso, uno de los alcaldes que visitó a la Gobernadora en los últimos días graficó: “Es como si te pega una piña Tyson (Boxeador campeón del Mundo en peso pesado), y no sabes que hacer, si tirarte al piso, salir corriendo, o qué”.
Claro, en el equipo bonaerense se esperaba una diferencia de menos de cinco puntos con el candidato a gobernador de Todos, Axel Kicillof. Sin embargo, el resultado de las urnas fue demoledor y, con el escrutinio definitivo finalizado, el ex ministro de Economía rompió la barrera del 50 por ciento y una distancia de casi 1.700.000 votos sobre Vidal. De esa manera, son 17 los puntos de diferencia a favor del representante del peronismo.
En ese sentido, y tras 19 días de luto, la Gobernadora retomó la actividad de cara a los vecinos bonaerenses. No lo hizo en cualquier lado, sino que optó porque el puntapié inicial sea en el interior de la Provincia y no en el Conurbano. De esa manera, Vidal buscará recomponer la relación en una región que supo ser un bastión del macrismo pero que en las Primarias le dio la espalda tanto a ella como a Mauricio Macri.
La ciudad elegida fue San Pedro, en la Segunda Sección electoral, y donde Kicillof sumó mayores adhesiones que la papeleta propia de Juntos por el Cambio. En definitiva, en el distrito que conduce el peronista en Cambiemos, Cecilio Salazar, la Provincia puso en marcha su impronta electoral. Claro, ahora la estrategia fue pergeñada en Calle 6, lejos de las órdenes de Marcos Peña a quien contabilizan como “el padre de la derrota”.
En la gobernación bonaerense saben que el escenario de cara a octubre es más que complejo y se necesita incrementar el caudal de votos de una manera histórica. Incluso, en los pasillos se llega a hablar de direccionar la campaña a los distritos claves, cuidar las comunas y garantizar cuevas de refugios para la transición de oficialismo a oposición.
Sin embargo, desde la mesa chica de la gobernadora María Eugenia Vidal no quieren dar el brazo a torcer y apuestan a mejorar los números. Un incremento en la papeleta provincial traería consigo una mejoría legislativa. Es decir, mejor reparto de bancas para ser una fuerza con buena representación en el Senado y Diputados. Otro espacio clave para proyectarse ante una eventual consolidación de la derrota.
Así, la estrategia oficial para mejorar el desempeño es la búsqueda de que la mandataria recupere la cercanía con los vecinos, que vuelva la gobernadora que desembarcaba sorpresivamente en las guardias hospitalarias, dicen por calle 6.
De esa manera, en San Pedro, Vidal tuvo una suerte de timbreo que comenzó a las 10hs con recorridas por los barrios del distrito y con conversaciones con los vecinos. Para la Provincia ya comenzó el operativo por el milagro electoral y el luto quedó en el pasado.